La iglesia salvadoreña exige una disculpa a diplomático venezolano

El Diario de Hoy

»Reaccionan ante declaraciones de diplomático venezolano

La Iglesia Católica salvadoreña emplazó al Encargado de Negocios de Venezuela, Wladimir Ruiz Tirado, a disculparse por haber arremetido contra el Arzobispo de San Salvador y presidente de la Conferencia Episcopal (CEDES), Fernando Sáenz Lacalle.

"Sería coherente, por lo tanto, de acuerdo con las buenas costumbres diplomáticas, que el Sr. Encargado de Negocios reconociera públicamente el error en sus palabras y actitud, y pidiera disculpa pública al Sr. Arzobispo", dice la Conferencia Episcopal de El Salvador en un comunicado.

Ruiz Tirado arremetió la semana anterior contra el prelado al pedirle que respete al gobernante de Venezuela, Hugo Chávez, después que monseñor Sáenz considerara antidemocrática la expulsión de dos observadores de Human Rights Watch del país sudamericano.

El delegado venezolano llamó al Arzobispo a "acogerse al Octavo Mandamiento de la religión que él dice profesar, porque no es cualquier persona, sobre todo cuando tiene una comunidad de fieles que le oyen".

Sin embargo, en el pronunciamiento los obispos le recuerdan al funcionario sudamericano que "gracias al sistema democrático que rige en nuestro País, los salvadoreños gozamos, entre otras libertades, de la libertad de opinión y expresión".

"Los conceptos expresados por el Sr. Arzobispo de San Salvador ante el acontecimiento lamentable de la expulsión, que calificó como autodefinición de una actitud que no es democrática, no constituyen falta de respeto al mandatario de la República de Venezuela: fue reflexión sobre el acontecimiento de la expulsión y no sobre la persona del mandatario", explican.

Agregan que el prelado se ha expresado sobre los aspectos éticos del mencionado acontecimiento, cosa que es propia del magisterio pastoral de la Iglesia Católica y de los obispos.
En este sentido, enfatizan que el hecho de que el Arzobispo se haya referido a los aspectos éticos de un acontecimiento objetivo no significa que haya faltado contra el Octavo Mandamiento.

De hecho, los obispos salvadoreños reafirman que es "un acontecimiento lamentable" la expulsión de los dos miembros de la Human Rights Watch, "que está ante los ojos de la comunidad y de la opinión internacional".

"Los Obispos salvadoreños, al compartir y apoyar los conceptos expresados por el Sr. Arzobispo de San Salvador, deploramos que se haya confundido la expresión de una reflexión y opinión sobre un acontecimiento objetivo, con la falta de respeto hacia el mandatario venezolano", finalizan.

El comunicado está firmado por todos los obispos, a excepción de monseñor Sáenz Lacalle, quien el domingo rechazó los señalamientos del funcionario venezolano y aclaró que él deploró el procedimiento del gobierno chavista al expulsar a los observadores, pero no atacó la figura del presidente Hugo Chávez.

La declaraciones de Ruiz Tirado también le valieron en su momento la crítica de funcionarios y políticos salvadoreños e incluso de un líder evangélico, el pastor Mario Vega, quien consideró que el gobierno chavista no tolera el menor señalamiento.

El Ministro de Seguridad, René Figueroa, consideró "abusivo" al funcionario venezolano.

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