domingo, 28 de septiembre de 2008

“Ser partidario de las FARC es terrorismo aquí y en Colombia”

El asesor de Álvaro Uribe revela que sin la ayuda de desmovilizados de las FARC muchos golpes que el Estado colombiano ha dado a este grupo no hubieran sido posibles.

Suchit Chávez


Obdulio Gaviria, asesor del presidente Álvaro Uribe
José Obdulio Gaviria está convencido de que las FARC son un movimiento en decadencia. Como uno de los asesores del presidente colombiano, Álvaro Uribe, defiende la “no negociación” entre el Gobierno y las FARC, grupo que ha salpicado a un dirigente de la cúpula del FMLN, José Luis Merino, a través del alias de “Ramiro”, nombre detallado en varios correos encontrados en el computador incautado al segundo a cargo de las FARC, “Raúl Reyes”.

¿Cuál es el proceso judicial que se sigue con toda la información que se recabó del computador de “Raúl Reyes”?
Todo el expediente está en manos de la Fiscalía. En lo que respecta a dirigentes políticos con fuero, está en manos de la Corte Suprema de Justicia, y son ellos quienes adelantan la investigación de esos crímenes. Esto es un crimen transnacional, tiene el elemento terrorismo, del que se desprenden homicidios, secuestros, tráfico de drogas, extorsiones. En lo que respecta a crímenes transnacionales ya hay decisiones, una fue la orden del secuestro y embargo de una caleta en Costa Rica, la orden de arresto de varios traficantes, uno de ellos en Asia, y también la orden de detención de una dirigente político terrorista, alias “Irene”, en España, esa decisión la tomó el juez Baltasar Garzón. Hay también órdenes en marcha respecto a daneses; hay investigaciones sobre un suizo, dos italianos, y en América Latina hay solicitudes de fiscalías de República Dominicana, Ecuador y Venezuela.

Se han detectado vínculos en varios países, ¿en qué medida hay correspondencia entre estos con partidos políticos? ¿O son personas muy específicas? ¿Cuál ha sido su militancia?
Pues militancia FARC en Europa hay mucha. Doce eurodiputados, y la refundación comunista en Italia; algunos grupos de izquierda unida en España y de los etarras, Harry Batasuna, así como organizaciones de Cataluña, o sea que eran militantes y también simpatizantes y colaboradores de las FARC al mismo tiempo. Eso es una posibilidad, otra es de quienes estando en la izquierda comenzaron a ver objetivamente lo que ocurría. Le voy a poner un caso de un salvadoreño muy conocido, es Joaquín Villalobos. El mejor crítico del entorno terrorista que se mueve alrededor de las FARC y de la organización criminal de narcotráfico se llama Joaquín Villalobos, y lo hace desde una perspectiva de analista de la izquierda internacional.

¿Cómo se vislumbran desde Colombia estos vínculos? ¿Tener vínculos con las FARC implica necesariamente un delito de terrorismo internacional?
Totalmente, que no quede duda, que eso quede claro. Ser partidario de las FARC, darles un reconocimiento como fuerza beligerante por ser una oposición armada legítima es terrorismo aquí y en Colombia, en Europa, en Asia y en África. La mayor organización terrorista del mundo se llama FARC, y ser su aliado es cometer el crimen definido por las Naciones Unidas como terrorismo.

¿En qué porcentaje se ha analizado que estos vínculos tuvieron una conclusión concreta? En El Salvador se ha dicho que los correos tenían pláticas, posibles acuerdos de negocios, pero no hubo nada concreto.
Todo simpatizante de las FARC es propenso o proclive al terrorismo, y el terrorismo incluye narcotráfico, compra venta de armas, traslado de fondos provenientes del secuestro. Y muchas otras cosas.

¿Colombia va a pedir de proceso local para estos vínculos internacionales?
Los esperamos, es lo menos que podemos esperar de los países democráticos. Que, o pongan en marcha su propia justicia, o si la decisión judicial de Colombia es tomada, las apoyen. Eso está ocurriendo con el juez Baltasar Garzón (en España).

¿Qué apertura tienen? Total. En general ha habido una muy importante cooperación con Colombia, espíritu de apoyo, y lo digo incluyendo a toda América Latina con una o dos excepciones.

¿Qué excepciones?
Nicaragua. Ha tratado como mansa paloma, como querubín a una de las terroristas, que estuvo en el campamento de “Raúl Reyes”.

Según usted, ¿a qué se debe que estos grupos sigan subsistiendo? Como usted me plantea el panorama, las FARC han perdido el apoyo.
¿Por qué subsisten las pandillas? Yo no sabría decirle por qué. Ahora, como organizaciones terroristas en el territorio colombiano tienen una explicación, son la organización hegemónica en la renta de la coca, total.


¿Se tiene estimado de la droga que le pertenece a las FARC de la que se mueve por Centroamérica?
Ya creo que es el cien por ciento, porque hay una gran alianza FARC y las organizaciones de narcotraficantes en todo el territorio colombiano.

En el caso de El Salvador, ¿hay más vínculos de las FARC? ¿Está comprobado? Habría que mirar, seguramente la autoridad judicial salvadoreña querrá explorar, pero yo solo conozco este caso específico, muy público que se ha ventilado (“Ramiro”) y que efectivamente está confirmado en el computador de “Raúl Reyes”.

Colombia ha pedido una asistencia judicial para identificarlo.
También en varios otros casos se ha solicitado la asistencia judicial, y se ha evidenciado el contacto.

¿Colombia está interesada en ju dicializar los casos de los vínculos internacionales de forma local, una extradición?
Totalmente, y se observa mucho las páginas web pro FARC un terrible temor de que eso ocurra, y se han empezado a trazar ciertas líneas que los desliguen de la actividad terrorista.

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